martes, 26 de febrero de 2013

No te retires hoy...


Hacia donde va él?
Hacia donde las ratas no lo alcancen
Y él así poder volar,
Como un pájaro pero sin alejarse.
Vive solo esperando ser vendido,
Como fruta en el mercado él se siente.

 Deberas pienso en su muerte,
Pero ya es grande, puede defenderse.

Morir? Eso es para tontos, 
Me dijo un día acostado en el césped.
No se rinde fácilmente,
Después de todo no es ningún demente.
Vive con su madre todavía,
Tan solo tiene 15 años.
Ya es grande para defenderse, 
No se rinde, solo cae pero vuelve a levantarse.
Ayer me dijo "ya es mi hora",
Para eso sos chico todavía.
Perderte no es lo que quiero,
Hoy se separa de sus palabras.
él se volvió un tonto,
Busca la muerte donde menos se la espere.
El hombre se volvió princesa,
Delicado ante la vida.
Pasó tiempo de aquel día, 
Que partió sin previo aviso.
Escapa de una cárcel de verdades,
Para ir a un santuario de mentiras...
Una soga como medio de transporte,
Hacia aquella otra dimensión.
Una silla como escalón,
Para poder levitar.
Y un nudo al rededor del cuello,
Ya para poder zarpar.



Te respeto, pero no te voy a dejar ir.

viernes, 22 de febrero de 2013

R u mine?

Me hipnotizo por aquella hermosa sonrisa,
que me logró sacar de delirios.
Que me tocó con su bella risa,
y me hizo salir de esos valles sombríos.

Su rostro en mi memoria,
funda la ciudad perfecta.
Su vida en mi corta historia,
es en su ruta la perfecta recta.

Su sonrisa hoy se aparece,
dentro de mi habitación.
Y mis ojos se estremecen
al saber que solo es la decoración.

La busqué en mis zapatos,
hasta dentro de mi placar.
No encontré mas que platos,
y  uno que otro juego de azar.

Hoy la encontré,
encerrada en esta jaula.
Yo fuí, entré,
tratando de sacarla.

Cuando mi vida se convierte en martirios,
ella trata de sanarla.
Si su vida se convierte en suicidio,
yo trato de sacarla.





sábado, 16 de febrero de 2013

Secuencia y repetición.

Caigo, lentamente caigo. Toda mi vida pasa delante de mis ojos... Desperté.

Sobresaltado por un sueño me levante de mi cama con ganas de llorar y desahogarme, no me llegaba el aire, un destello de luz pasaba delante de mis ojos, iba y volvía, iba y volvía repetidamente. Caí al suelo, pero al despertar era algo diferente, estaba todo nublado dentro de casa, afuera era como un cañón  las calles ya no estaban, tan solo mi casa sobre un precipicio, como si fuese lo única vivo de la tierra.
A los minutos de pensar que habría pasado fui hacia mi habitación, miré por esa ventana y allí atrás había una selva, abrí la ventana, salí de la casa y fui a caminar por allí...
Pasé unas horas caminando, buscando civilización, pero lo único que encontré fue un edificio abandonado en el medio de la selva, entré y estaba lleno de árboles, lianas, animales...
Tenía algo de miedo, cuando llegué al piso de arriba había una puerta de un metro de altura aproximadamente, era verde con manchas de pintura negra, la pateé, estaba cerrada con llave, con el impacto se abrió y entré.
La habitación era rara era de una color azul tornasolado, con algo de verde y en la habitación había varios armarios cada uno con distintas cosas adentro, pero todos iguales. Opté por abrir el primero habían solo arboles. Abrí el segundo, solo veía un mar. Pero cuando abrí el tercero había un ciudad, era como si hubiese estado enfrente de una ventana de uno de los últimos pisos de un edificio. Sentí que alguien me empujó y comencé a caer, pasaban los segundos y estos se convirtieron en minutos, el piso cada vez estaba mas lejos de mi cuerpo.
Caigo, lentamente caigo. Toda mi vida pasa delante de mis ojos... Desperté.
Recostado en mi cama, todo sudado miré hacia arriba, mi techo estaba manchado, mi placar cerrado, la puerta rasguñada, ¿Qué había estado pasando?. Susurré "No tengas miedo, no tengas miedo, es solo otro sueño", y lo repetí una y otra vez hasta poder pararme.
Me acerqué a la puerta, la observé un momento, salí a dar una vuelta por la casa, para ver si todo estaba bien. Estaba todo perfecto, pero me estaba olvidando de algo... El placar. Lo abrí y era otra vez un edificio, me volvieron a empujar y caí.
Caigo, lentamente caigo. Toda mi vida pasa delante de mis ojos... Desperté.
Corrí al baño a lavarme la cara, había una persona me agarró y me arrojó por la ventana.
Caigo, lentamente caigo. Toda mi vida pasa delante de mis ojos... Desperté.
Y volví a caer. Una y otra, y otra... Y otra vez.
La ultima vez toqué el suelo, pero solo me paré y logré caminar. Era cuestión de perder el miedo y no rendirse.
Si caes, tan solo levántate.








viernes, 15 de febrero de 2013

Mil y un arboles...

Entrando en mis sueños, navegando en mis ideas, caminando en mi cabeza, ¡Cuanta mierda tirada en el suelo!
 ¿Ese lugar?, es mi mente, es mi bosque, es mi mar, mi océano. 
Mil y un arboles sembrados en el sendero, el tiempo no me gana, sobrevivo en un mundo en donde todo está a disposición del mismo, ¿Por qué no podría reinar en mis sueños? 
Me alimento de perdones y lamentos de personas inocentes, no logro ver mas allá de mis respiros.


Me encontraba allí olvidado, sentado en ese bosque, debajo de el primer árbol que sembraron mis memorias, escuchando la música que mis oídos querían escuchar. Mirando hacia aquella luna que no brillaba, pero sin embargo me lograba alumbrar.
Callado, observando a los animales pasar, primero un alce, un conejo, un lobo y por ultimo búhos, muchos búhos... Cada sonido me hacía recordar a algún momento de mi vida y cada momento hacía nacer un árbol.
Me levanté de golpe, estaba algo mareado, decidí ir al río, a aquel río cristalino que con mis lagrimas había sido formado, en el mismo volvía a ver esos peces que eran como personas en el corazón de mi mundo, me acerqué a ellos y huyeron despavoridos, mi persona había cambiado, había espantado a algunos, pero a la vez atraje a otros.
-¡¿Qué hago yo perdido en este bosque?!-Grité, y una voz que no reconocía me respondió -Esto es tu vida, mejor dicho tu mundo,esto es lo que hiciste de vos y lo que vez es tu ser. Te parece sombrío, ¿Verdad?, así es como te ven los demás y como te haces ver.
Recapacité, a mi me gustaba, la verdad no me debería importar la opinión de los demás, era mi mundo, mi palacio, mi bosque. Mis memorias dibujaban aquel manto que cubría el cielo para hacerlo de un color tenue pero a la vez el mismo intentaba levantar y hacer volar mi vida.
Reino en mi bosque de memorias, en mi jardín de sueños, vuelo en este mundo que aparece y desaparece con personas que caminan como llevando el tiempo en la espalda, acompañados por las memorias convertidas en arboles,¿Mi imaginación? Y/o prefiero llamarla mi mundo, ¿Y mis memorias? Son aquellos mil y un arboles de mi puro bosque, no piensen mal de mi, solo quiero el bien de mi imaginación para poder seguir acompañandolos...

Cuando se sientan solos sepan que mi mente los acompaña.



domingo, 10 de febrero de 2013

~Hoy la muerte se convierte en mariposas.

¿Alguna vez se sintieron tirados?, ¿Como dejados de lado?
Bueno... Eso sentí yo en aquel momento, me sentí... raro, mal, sí, algo estaba mal. Mi cabeza estaba mal.
Creía que todo era pasajero, pero al parecer estaba equivocado...
Empezó todo con problemas de familia, desde la muerte de mi abuelo.
Hoy la muerte se convierte en mariposas...
Intentando olvidar su muerte,
olvidé que tenía demás cosas y la vida se volvió recuerdos.
Hoy recuerdo su cara detrás de aquella fuente,
que en algún momento fueron mariposas y encuentros.

Solía perder la clama,
por aquel hombre que cuidó de mi,
pero espero su vuelta en cama,
como si él fuese a venir.

Susurro y grito su nombre,
Sentado en esta roca,
intento no llorar por aquel hombre,
que en algún momento fue mi boca.

La vida se compone de memorias,
Algunas sanan, otras son como esposas.
Yo no voy a dejar ir las cosas,
aunque la muerte se convierta en mariposas...

Carta de un niño en guerra... II

Recuerdo ese día que empezó todo, un pesadilla.
Hoy mis papás ya no están y yo estoy solo, las personas me olvidan, poco a poco el cuerpo va decayendo, cansado voy sin rumbo alguno, buscando aquel lugar, aquel lugar que... En algún momento logro ser el arco iris después de una lluvia de muertes y emociones.
Hoy las personas que amo se van y yo voy detrás de ellos, intentando ser uno mas y mezclarme entre ellos.
Hoy toco la puerta de aquella casa que alguna vez fue mi hogar y sin respuesta trato de entrar.
Hoy vivo, pero mañana ya no, va a ser otro día, tal vez siga acá, tal vez esté en algún otro lugar o tal vez, solo tal vez estaré donde ellos estén.
Hoy vuelvo a escribir a ustedes, hoy vuelvo a desahogarme, hoy volví a vivir e intento seguir como ahora estoy.



Llegando a mi casa ese viernes a las 6 de la mañana después de el terrible suceso, colgado de un año de muertes y escondites, un año plagado de males y sofocaciones, traté de correr de la alegría, no lo logré. Mis dos piernas estaban lastimadas, lloraba de dolor y felicidad, pero no me rendía, ya faltaba poco para llegar, solo una cuadra mas.
Toqué la puerta una vez "Toc-Toc", nadie contestaba, dos veces "Toc-Toc", no escuchaba ruido alguno a través del cerrojo, tres veces "Toc-Toc", ya me estaba asustando, cuatro veces, esta vez ya muy asustado y nervioso "Toc-Toc-Toc-Toc-Toc-Toc-Toc-Toc", cada vez mas rápido y fuerte, escuché un grito, era un hombre, no lo reconocía,  "¡Ya voy, ya voy!" gritó con fuerza pero algo cansado.
Cuando abrió la puerta me dijo "¿Vos quien sos?", yo le contesté "Tu hijo!", a lo que él respondió "Creo que si lo tuviera me acordaría de él, ¿A quién buscas?", yo sin responder y algo frustrado miré hacia abajo, di media vuelta y comencé a caminar, El hombre me gritó "Te hice una pregunta!", le contesté a mis papás, hace dos años vivíamos acá todos juntos", me dijo que ellos compraron esa casa hace dos años, que los antiguos dueños habían muerto en un avión o algo así, quedé paralizado, tenía mucho mas miedo, comencé a tartamudear intentando decir que me ayudara, pero el hombre cerró la puerta en mi cara.
Salí corriendo y llorando por las calles, pero ya no recordaba nada de la ciudad, sabía lo que se sentía ser un chico explotado, sabía lo que se sentía ser pobre, ser huérfano, ser... Chico.
Lo que muchos creen dolor, lo que muchos creen la muerte, piensan que un niño no puede vivir sin la tecnología, lo que yo vivo es dolor.
La familia hace mas falta que el aire y el agua mismo, un año entero intentando sobrevivir en un país que no conocía, que me obligaba a morir, sin embargo yo viví por ellos, para llegar aquel día a mi casa y encontrarme con que mis papás... Ya no estaban.
Hoy me ahogo en un vaso de lagrimas y en el río de penas que yo mismo había hecho fluir, hoy muero, solo acribillado en una esquina de mi habitación, en una nueva casa, mis padres no son ellos.
Ya nada es lo mismo...



Morir? Ya no le tengo miedo.