sábado, 30 de marzo de 2013

Ven conmigo...



Te voy a llevar conmigo.
Eran las 10 de la mañana, me estaba arreglando para irme de viaje, me habían dicho que era un lugar hermoso. Pero teníamos que parar a descansar en la noche en una cabaña.
Iba en el auto, no soy de hablar mucho con mis papás así que me había puesto los auriculares y escuchaba música. Así las 12 horas de viaje. A las 10:30 llegamos a la cabaña, estaba en un pueblo pintoresco  por así decirle, raro, era diferente, pero no había preocupaciones porque solo nos íbamos a quedar un día.
Nos dieron las llaves y entré yo primero, estaba todo sucio, así que mi mamá comenzó a limpiar lo que veía. Mientras tanto yo veía las habitaciones y elegía en cuál iba a dormir yo.
La primer habitación no me gustó, estaba muy abandonada, con un papel tapiz color verde oscuro y una guarda de flores (rosas y claveles), me atraía algo, pero no era para mi. 
La segunda habitación tenía un televisor y una cama de dos plazas, por lo que supuse que era de mis papás.
La tercera habitación tenía un papel tapiz de color rojo, con una guarda en tonos mas claros, en la que dibujaban flores campestres, la pared era blanca, había una chimenea, televisor y una cama de una plaza y media. En fin bastante elegante. Me quedé ahí.
Al llegar la noche me preparé para dormir y me acosté. Comencé a escuchar cosas, eran ruidos  mas bien gritos, llantos, y al pasar de unos minutos todo calmó.
Estaba algo aterrado, no me gustaba nada lo que estaba pasando. Encendí el televisor para distenderme. Miré hacia la ventana, solo se veía la sombra de los arboles...
Estaba mirando mi serié favorita, cuando de pronto se apagó todo, grité "Mamá!", nadie contestaba así que fui a ver.
En su habitación no había nadie, en el baño tampoco, en la habitación abandonada no habían ni rastros de vida. Cuando llegué a la cocina, había una nota pegada en la heladera, decía "No te muevas de donde estas mi amor, ya te vamos a volver a buscar.", no decía de quién era, ni para quien, pero supuse que me lo había escrito mi mamá para mi, tal vez se habían ido a comprar...
Esperé sentado mirando hacia afuera una hora y me cansé, fui a la habitación abandonada, cerré la puerta y comencé a hablar solo, decía cosas como "Qué habrá pasado?", "Por qué se fueron?", "Vengan rápido " O hasta "No van a volver..." Y empecé a llorar, hasta que sentí una mano en mi espalda, y una voz risueña que me decía "Ya va a pasar, amor", creí que era mi mamá, pero cuando miré hacia atrás no había nadie. Escuché otra vez su voz diciendo "Me da vergüenza salir, no mires", entonces no miré y otra vez sentí su mano en mi espalda, pero era seguro que no era mi mamá, así que estaba muy asustado.
Me dijo "mirame ya" y levanté la cabeza, era una chica muy pálida  de cabello oscuro, bajita de estatura, y hermosa, me dijo "en realidad estoy muerta, soy un fantasma, cuando estaba viva no era así de pálida  No te asustes...". No era la ocasión ni el momento perfecto para no estar asustado, pero sin embargo confié en ella y le dije susurrando "Está bien, confío", me agarró la mano y caminamos por la casa. Cuando llegamos a mi habitación, me recostó sobre mi cama y me dijo "Me voy.", no pude decirle nada y tenía mucho sueño así que al instante me dormí.
Me desperté al otro día con esperanzas de volverla a ver, pero lo primero que vi fue la cara de mi mamá y escuchaba que me decía "Te quedaste dormido acá, vení ya nos tenemos que ir.", miré a mi alrededor y estaba en la habitación abandonada, no había nadie mas que mi mamá y yo. 
Me levanté y fui hasta mi habitación, agarré el bolso para seguir el viaje y traté de olvidar todo lo que, tal vez, había pasado...
Otra vez en el auto unas 15 horas, el sol pegando y quemando sobre todo lo que tocaba, yo tratando de quedarme del lado de la sombra del asiento de atrás y con mis auriculares escuchando la música a todo volumen, sin escuchar nada mas que la melodía en mis oídos. Así un rato y... Me dormí.
Al despertar el auto estaba sobre la banquina de la ruta, chocado contra una montaña, teñido de rojo vivo, era un liquido espeso, con un olor parecido al oxido. Era sangre, mis papás estaban afuera del auto tirados, desangrados y... Muertos.
Yo, adentro del auto, sin heridas y ella a mi lado, su voz esta vez me decía "No estés mal, estas conmigo, yo te voy a cuidar y espero que te acuerdes de mi cuando necesites algo, porque ahí voy a estar para vos.", la miré a los ojos y la abracé, no sabía si llorar por mis papás o sonreír por ella, así que intenté ignorar lo demás y concentrarme en su muerto amor.
Me sacó del auto y me llevó a una cabaña que quedaba cerca de ese lugar, ahí me recostó sobre una cama y me dijo "Descansá un rato, te va a hacer mucho mejor.", le hice caso y me dormí.
Cuando abrí los ojos mi mamá estaba intentando despertarme, y para mi sorpresa estaba en mi auto, me dijo suavemente "llegamos mi amor.", miré al costado y estaba un hotel gigantesco de cinco estrellas. 
Cuando entramos nos llevaron las maletas a la habitación y fui a la sala de estar del hotel, era todo muy elegante, unas paredes rojas, y detalles en negro y con madera, me encantaba todo.
Subí a la habitación 513 en el piso 5 (Era la mía), y al entrar lo primero que hice fue correr hacia la cama y acostarme, los minutos de tranquilidad iban pasando, mientras yo miraba al techo, hasta que me dormí. 
Desperté después de unos minutos, pero no veía nada, en ese momento escucho "Despertaste! Adivina quien soy?", y comencé a ver, era ella tapándome los ojos, yo me había asustado, así que ella se disculpó. Esta vez en la habitación, había algo raro, cada un minuto escuchaba un grito que se alejaba de a poco hasta cortar con un golpe seco. Fui hacia la otra habitación y había un hombre que se levantaba de la cama, se agarraba la cabeza, abría la ventana y se tiraba, y así repetidas veces.
Yo algo asustado y perturbado por la extraña situación corrí hacia la ventana y salté... Caí.
Al despertar, abrí los ojos y a mi lado estaba mi papá y me dijo que estaba gritando dormido, la habitación estaba normal y el hombre... Ya no estaba. Todo era raro, era como si mis sueños fueran guiados por ella.
Era hermosa, su cabello se deslizaba por sus hombros para llegar hasta su cuello, sus piernas pálidas bailaban al compás de mi corazón y su mente parecía comprender la mía  era perfecta, era... Era mía, hasta donde podía serlo.
Salí a caminar un rato por la noche, las calles estaban plagadas de gente y los ruidos azotaban mi cabeza, no necesitaba mas que escucharlos para poder entender que no iba a ser fácil estar tranquilo en aquel lugar. Mis papás me dijeron que si quería estar tranquilo lo mejor sería ir al lago, esa noche había luna llena, nunca iba nadie y no había viento. 
Mi papá me dio la llave del auto, a pesar de que tenía 16 años mi papá confiaba lo suficiente en mi como para prestarme su preciado auto por un par de horas, lo encendí y tomé rumbo hacia el lago.
Al llegar, estacioné debajo de un puente y bajé del auto con algo de comida, la luna, redonda y grande como nunca la había visto, su reflejo perfecto en el calmo lago, no había ni una pequeña brisa de viento, todo estaba tranquilo, era hermoso. 
Me recosté a orillas del lago, mientras observaba los peces en el agua, el sonido de las gotas que producían ellos cayendo sobre el agua era muy tranquilizante. La melodía de la música del auto junto a los leves sonidos de los animales daba vuelta en mis oídos hasta desaparecer. Los últimos pájaros cantaban y cerraban sus sonidos con un silbido que parecía eterno e invadía mi cabeza, pero a la vez me hacía bien.
Desde el centro del lago una luz se acercaba a mi, a medida que iba saliendo del agua me iba dando cuenta de que era ella... Era ella otra vez, se acercó a mi y me acarició la cara con su mano, me dijo "vamos a ser felices juntos, para siempre, amor.", me dio la mano y caminamos juntos hacia el agua...
Abrí los ojos y mis papás estaban llorando al lado mio, yo estaba en una sala de emergencias, tenía heridas y marcas de asfixia, principios de hipotermia y no entendía nada de lo que estaba pasando en ese momento. Por lo que me contaron estaba ahogándome en el lago cuando una mujer nadó y me sacó del agua, es mujer estaba en la sala...
Cuando la miré, me dijo "Despertaste, te dije que nunca te iba a dejar solo...", era ella, perfecta como ninguna otra...
Ahora me toca a mi marcar su historia como ella marcó la mía  desde mis sueños hasta volverme a la vida. Gracias a ella hoy puedo ser feliz y gracias a mi ella va a ser inmortal, o al menos en mi corazón...







miércoles, 27 de marzo de 2013

Stay a few moments more... Je t'aime.

Esperame esta noche, tal vez el tiempo no dure segundos, tal vez tampoco horas, ni días, pero todo tiempo alguna vez termina. Y se que voy a estar cuando este llegue a su fin...

De noche, otra vez tirado en el suelo mirando al techo, pensando un rato... Me quedé dormido.
"Stay a few moments more...", rompía el silencio una voz que susurraba y me hablaba con un tono aterrador,      no sentía obligación hacia nada, pero la voz retorcía mi mente y me hacía quedarme allí. De a poco comprendí que no todo pasa como debería, tal vez hoy no soy el de las decisiones en casa, pero mañana tal vez, solo tal vez pueda serlo, y vos vas a estar conmigo, reinando en nuestro propio mundo.
Camina sobre la misma tierra, de mi mano y escuchando mi voz, mientras te digo al oído que te amo y te demuestro lo que siento a través del calor que te doy... Que esto no lo controle el tiempo, mucho menos un reloj... Espero que sea el amor.
Suelo acostarme en mi cama y pensar un poco, sobre las cosas que me están pasando, nunca dudé nada, siempre quise lo mejor para lo mas importante.
...

Desperté otra vez... Un sueño, muy parecido a la realidad y vos estabas ahí para cuidarme. Me sacaste de las sombras de mi vida y me pusiste en un lugar mejor, mas alto.
Hoy estoy bajando del ultimo piso de esa torre, de donde el sol alimenta la vida y el aire nunca falta, hoy ya no lo merezco, por no cumplir una promesa.
Desaparecí.
"Stay a few moments more..."... Me había vuelto a dormir...



domingo, 24 de marzo de 2013

Ultima esperanza.

No dejes que los miedos te ataquen, porque contra ellos los únicos que pueden ganar son los sueños... Y yo todavía no aprendí a soñar despierto...

Te esperé un par de horas sentado en la vereda, comenzó a llover y mi pelo, mi cara y mi ropa se mojaban. Miraba al cielo, las gotas caían y explotaban en mi rostro.
Veía pasar varias personas en frente de mi y vos no llegabas. Pasó una hora, pasaron dos, la tercera ya estaba llegando... Me levante del piso y caminé toda la noche por las calles mojadas.
Se hicieron las 4 AM, llegué a mi casa, abrí la puerta y estaba sin llave, pero recordaba haberla cerrado bien. Entré y me fijé por todas las habitaciones, al llegar a mi cuarto me desvestí para dormir y para mi sorpresa ahí estabas vos, esperándome dentro de casa...
No había esperanza de encontrarte esa noche, pero sin embargo me esperaste ahí.



Canción para mi muerte.

viernes, 22 de marzo de 2013

Our Future in Paris...



Era martes a la tarde, y aquel chico se acercaba a mi riéndose  Lo miraba fijo, creía que me iba a robar, pero tan solo siguió su camino.
Revoloteaba como una mariposa sobre el césped  caminaba de acá para allá  daba vueltas en el lugar, era... Era libre.
"Me estrello contra tu hermoso rostro...", cantaba y yo recordaba a mi papá cantándole esa canción a mi mamá, cuando yo era chico. Que buenos tiempos aquellos.
Explotaba su voz contra la pared y rebotaba con un sonido un tanto mas tenue. Él resistía, era un loco con poco tiempo.
Cada tanto miraba su reloj de muñeca, se agarraba de la cabeza y decía "se me hace tarde!", algo apresurado y luego seguía cantando hacia la pared.
No entendía como él podría llegar a tiempo al lugar que tenía que ir si no hacía nada para apresurarse.
Luego de unos intensos minutos escuchándolo cantar su canción una y otra vez, veo que se para y comienza a caminar en dirección a las amacas  Ahí había una chica sentada mirándolo hace un buen rato.
Logre escuchar una voz dulce y baja que decía "Otra vez llegaste tarde...", en ese momento la sonrisa del loco desapareció y en su cara se dibujó una lagrima y un rostro triste.
La chica se paró y camino, cada vez se iba mas lejos, él solo la veía, no podía hacer nada...
Pasaron dos días y volví a la plaza, el mismo tipo estaba ahí sentado, cantando la misma canción y la chica en la amaca mirándolo, pero esta vez ella recién llegaba.
Me acerqué a ella y le pregunte "¿Por qué no te acercas vos?", a lo que ella me respondió con una extraña mueca en su cara y con un sonido, algo parecido a "mh...". Se peinó un poco con sus pequeños dedos y lo siguió mirando.
El tipo la vio y salió corriendo hacia ella, pero ella le dijo "Otra vez llegaste tarde...", y lo mismo volvió a pasar.
Al día siguiente volví a la misma plaza y le dije al hombre "Andá a las amacas, hay alguien especial esperándote , él se paró miró a las amacas y sonrió, no hablaba, pero se notaba que estaba feliz. Cuando llegó al lugar se acercó a la chica y le agarró la mano, esta vez todo cambió, ella le dijo "Volviste conmigo... Te amo". El loco la abrazó y la besó en la boca, yo desde el otro lado de la plaza estaba mirándolos, eran perfectos, las flores nacian a su alrededor y el rencor moría en el amor de esas dos personas.
El hombre estaba loco, loco de amor por esa mujer que no podía tener, y que sin embargo quería y luchaba por ella.
La mujer solo era una mas, pero encontraba en él una vida por delante y la oportunidad valía la pena.
Al día de hoy, él es mi mejor amigo, mi hermano y aunque esté lejos de mi, tal vez en otro continente, seguimos "comunicados", y estoy feliz de que ella haya sido la que le dio el color a su vida.


The true Love is Forever...
                                 The true Love is Forever...
                                                                  The true Love is Forever...
                                                                                                   The true Love is Forever...

viernes, 15 de marzo de 2013

Another Day with You.

El cesped recien cortado,
El aroma a plantas humedas, 
La lluvia recien acaba de cesar,
Y la tierra se convirtio en lagos.


Intento mirarme al espejo, 
Ese que de pronto se volvio agua,
Ya no encuentro mi reflejo,
Mi corazon cayo al vacio.


Despertate, no queda tiempo,
Tenemos que escapar de este final,
Espera a este pequeño insecto,
Ahora todo vale...


Observá esos charcos de agua,
Mira las pisadas de esos niños,
Las gotas cristalinas vuelan por los aires,
Y explotan en un valle de pinos.


Luces tocan el cielo,
El sol refleja su brillo en las montañas,
Este es el mejor paisaje, sin dudas,
Tu cara en este retrato...

domingo, 10 de marzo de 2013

El cuaderno de la Esquizofrenia.

Muerto o no, acá estoy devuelta, pero... Muerto no quiere decir sin vida...

Corro, corro por el bosque, me pierdo entre el raro color verde grisáceo de las hojas, supongo que es un pinar, arboles muy altos,  y los ruidos... Los ruidos no están, es todo tan silencioso y muy calmo para ser la realidad, pero sin embargo lo es.
"Estoy desesperado por algo que no está pasando, ¿me estaré volviendo loco? No lo creo, tal vez solo necesito descansar, analizando que no duermo hace un par de días...
Esta noche voy a dormir bajo algún árbol, ya que no me molestaría nadie en este bosque , y si tengo suerte, tal vez mañana despierte." , fue lo que escribí aquella noche, en aquel... No recuerdo bien, creo que era un cuaderno de matemáticas que ya no usaba. Por si les interesa, aunque creo que es algo obvio, aquella mañana desperté...
Pasé días en ese bosque intentando comer lo que fuese, hasta que encontré el lugar en donde estoy ahora, es algo así como una cueva, una cueva oscura, húmeda, y algo calurosa.
Usaba aquel cuaderno para dibujar lo que veía, arboles, animales, personas... Lo que me parecía raro es que ellos nunca me veían, solo pasaban corriendo, como sombras a la lejanía, los niños corrían, se reían y yo sentado al lado de los arboles mirándolos, aunque ellos no se dieran cuenta de mi presencia.

"Sus brazos vuelan por los aires, esperan el grito de sus amigos tratando de alcanzarlos. Corren desaforados  están tramando algo, lo sé, solo espero que ese "algo" no sea contra mi, aunque creo que en este caso que no me vean es una ventaja bastante grande...", continué escribiendo en mi cuaderno. Imaginaba todo lo que podía e intentaba dibujarlo, pero esto era enserio, corrían a mi alrededor y sentía sus pisadas cerca mío.
Me unía con la propia naturaleza, parecía tener algún poder para mimetizarme con ella, como ya dije antes no se daban cuenta de mi presencia. Caminar en ese bosque creo que no es la mejor solución, pero creo que en el momento me despejó un poco.

"Desde la copa de este árbol puedo ver todo, todo excepto la vida de los demás, cosa que me gusta, ya me sofocaba estar tanto tiempo junto a esos individuos que ni siquiera se si son de verdad... Voy a estallar si no vuelvo pronto a casa. Mi cuaderno es el único que me hace compañía en este momento y yo... Yo tan solo desperdicio sus hojas en esto..."
Escribía al rededor de una o dos hojas por día, escribía lo que pasaba a mi alrededor, lo que me pasaba a mi, escribía canciones, y esos niños otra vez volvían a correr.

"Estoy escribiendo una canción, se llama "Los sueños corren", mas que nada trata de aquellos niños, los tomo como sueños, porque yo los puedo creer reales, pero si nadie me da una señal no puedo saber si son la realidad o no...". Recuerdo que ese día pasé horas y horas sentado en esa roca cerca de la cueva escribiendo esa canción e intentando imaginarme esa melodía tranquila, armónica, suelta.

Ese árbol en el medio del bosque era raro, no era un pino, no un álamo  no era un sauce, la verdad no se lo que era, pero habían muchas personas abrazadas a él, yo me acerqué e intenté tocarlo, cuando lo toqué todo comenzó a girar, todo se tornó oscuro y se tiñó de tristeza.
Caían las hojas como meteoritos, desplegaban la tierra de su lugar y el viento comenzaba a correr por entre los arboles dejando un rastro de ruidos agudos, como silbidos.

"Despertar es mi ultimo recurso, al final siempre todo es una mentira y aunque no quiera creerlo así, así lo es. Creo que voy a caminar, entre las lúgubres sombras de este bosque por unas horas y voy a escribir a medida que el tiempo vuele al lado mío, mientras corro de esto.", fue una de las ultimas paginas del cuaderno, sin duda no lo había aprovechado bien y fue peor al saber que después de todo... Estaba perdido en mi propia mente...
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-¡¿Me estas escuchando?!- Escuché una voz enojada y algo asustada.
 Ahora estaba mirando hacia una pared  y caminaba hacia ella con un papel y un palo en la mano, escuchaba que todos me decían cosas como "No hay arboles..." o algunas cosas sobre bosques...

-¡Te pregunté algo!- Volvió a decir.
-Ah, si... Creo.- Respondí confundido.
-Ahora dame esa hoja y anda a tu habitación.
-Toma.- Le dí las hojas y me acompañaron dos hombres vestidos con trajes de doctor blancos hasta una habitación que solo tenía una cama y una lampara entre rejas.

Al pasar el tiempo esa habitación se fue convirtiendo en mi vida y hoy tengo toda clase de animales acá adentro, tengo armas, tengo arboles, tengo millones de platos de comida, mozos, mucamas, amigos, lo único que no tengo es lo mas importante... El poder ver la realidad como verdaderamente es...



Vi a la gente que me rodea desaparecer por mi culpa, no quiero que mis creaciones desaparezcan como si fuesen tan solo otra hoja de papel de aquel cuaderno bordó...

sábado, 2 de marzo de 2013

Old Times...

Una nueva entrada, en este cuento de 100 historias de 1000 paginas. Un nuevo día intentando emprender camino a la realidad, aunque no lo creas me duele. Sobrevive después de viejo, flota entre sueños quizá.
Te busqué donde no estabas y así igual te encontré, vos viniste hacia mi.
Te conocí lo suficiente para llegar a amarte y respetarte.
Caminé hacia vos por un sendero certero y sincero, sin curvas ni limites. Hoy pretendo correr junto a vos para siempre, esta carrera no tiene final, tampoco se cuando empezó pero hasta que uno de los dos no esté vamos a permanecer juntos en ella.

RECUERDOS!... En los viejos tiempos.
¿Te acordas de ese amigo que simplemente estaba en tu casa y no se iba nunca? Apuesto que ya no está, ahora es otro, lo cambiaste... Te cambió...
Me di cuenta de que era una molestia después de casi 14 años de haber "vivido" con él.
¿Te acordas de esos juguetes que no soltabas ni en sueños? ¿Esos con los que dormías? Apuesto que ya no los tenes, los tiraron, los escondieron, desaparecieron... Por alguna razón ya no están.
Esos dinosaurios se fueron de la realidad y ahora se que solo estaban en mi mente, en mi imaginación.
¿Te acordas de esos dibujos que por mas simples que eran hacían feliz a quién se los regalaras? Apuesto toda esta historia, aunque se que no vale mucho, que ahora son diferentes, tal vez mejores, tal vez peores, pero no son los mismos y lo mismo pasa con su precio, este cambia, son mas "torpes", no son tan bonitos e importantes.

Tiré una piedra al lago, la vi hundirse. Estaba sentado en la orilla, veía a los peces saltar, los veía nadar, los veía flotar, las flores silbaban junto a la brisa del viento. Extraño aquel paisaje, o el del campo, como en los viejos tiempos.
Montar caballos, recuerdo que mi caballo se llamaba "Tordillo", era un caballo blanco, lo amaba, me subía a él y me sentía uno.
Los años pasaron, fui creciendo, perdiendo interés por esas cosas, pero hoy que lo vuelvo a querer, desaparecen.
Los momentos mueren y se sepultan en recuerdos, lapidas rotas, a veces de oro, otras de madera, pero siempre en ese cementerio que es tu cabeza.
"Metete al lago, nada con los peces", me dijo mi papá con un tono de burla porque yo no sabía nadar en esos tiempos. Tenía una excelente relación con él, era como mi mejor amigo, vivíamos solos en esa cabaña aislada de todos.
Me reía todo el tiempo con él, fueron los mejores años de mi vida.
Un día me fui a las montañas con un primo que había ido de viaje unos días, al llegar a la cima miramos para abajo, no se veía nadie, las pocas personas que habían en mi familia se veían como hormigas.
Estábamos aburridos así que decidimos hacer una carrera para ver quién llegaba abajo primero, cada uno por su lado.
Empecé a correr por la montaña y me crucé con la primer roca, la salte y caí apoyando todo el peso de mi cuerpo sobre mis manos. Las miré estaban todas cortadas, me dolían muchísimo pero seguí corriendo con toda la inocencia de un niño para llegar primero y ganar aquella tonta carrera.
Legué primero, pero me asuste por mi primo, no llegaba, así que decidí ir a buscarlo.
Corría con mis manos sangrando pero dispuesto a encontrar a mi primo que se había perdido en la montaña.
Cuando llegué a la mitad de la montaña miré para todos lados, no creía que pudiese estar mucho mas arriba así que fui a darle una vuelta a la misma revisando todos los lugares. Cuando iba ya del otro lado de la montaña encontré una valle,  una pradera, habían osos y otros animales. Con cuidado caminé mirando y buscando a mi primo perdido y, lo encontré estaba sentado en una roca mirando a los osos pescar y tomar agua.

Me dirigí corriendo hacia él y le dije -Vamos, volvamos a casa antes de que nos castiguen!.

-Un rato mas, esto es hermoso, ¿Qué no ves?- Me dijo apuntando hacía los animales.

Lo agarré del brazo y lo tironeé hasta que nos fuimos, corrimos para que no nos retaran porque llegábamos tarde a comer. Cuando llegamos mi papá me miró fijo y me dijo, "no se habrán ido a las montañas, ¿No?", yo miré a mi primo y contesté algo mas tarde "No... No, no se me ocurriría ir a las montañas...".
Pasaron los días y nosotros seguíamos yendo al lugar, me encantaba ir ahí me sentía libre, pero... Todo lo bonito algún día termina.
Habíamos salido temprano con mi primo, era uno de los últimos días en los que él se quedaba, fuimos al valle y nos escondimos atrás de los arboles a observar a los osos.
Mas o menos cuando pasó una hora escuché un sonido, había alguien o algo respirando atrás mio, cuando volteé a ver había un oso detrás de nosotros. Yo corrí, pero mi primo se quedó petrificado mirando los ojos negros de aquél oso, y éste levantó la pata delantera y araño con sorprendente fuerza a mi primo, no supe hacer otra cosa que correr...

Me arrepiento... de tantas cosas me arrepiento, tantas cosas hay que hice mal, tantas cosas dejé atrás y sin embargo sigo acá con ganas de vivir, aunque a veces piense que no, mi lugar no lo va a ocupar nadie mas.
No me voy a rendir, voy a seguir y voy a intentar lo que tengo que hacer. Ademas, es preferible intentar antes que fallar, ¿No?