Era martes a la tarde, y aquel chico se acercaba a mi riéndose Lo miraba fijo, creía que me iba a robar, pero tan solo siguió su
camino.
Revoloteaba como una mariposa sobre el césped caminaba
de acá para allá daba vueltas en el lugar, era... Era libre.
"Me estrello contra tu hermoso rostro...",
cantaba y yo recordaba a mi papá cantándole esa canción a mi mamá, cuando yo
era chico. Que buenos tiempos aquellos.
Explotaba su voz contra la pared y rebotaba con un sonido
un tanto mas tenue. Él resistía, era un loco con poco tiempo.
Cada tanto miraba su reloj de muñeca, se agarraba de la
cabeza y decía "se me hace tarde!", algo apresurado y luego seguía cantando hacia la pared.
No entendía como él podría llegar a tiempo al lugar que
tenía que ir si no hacía nada para apresurarse.
Luego de unos intensos minutos escuchándolo cantar su
canción una y otra vez, veo que se para y comienza a caminar en dirección a las amacas Ahí había una chica sentada mirándolo hace un buen rato.
Logre escuchar una voz dulce y baja que decía "Otra
vez llegaste tarde...", en ese momento la sonrisa del loco desapareció y
en su cara se dibujó una lagrima y un rostro triste.
La chica se paró y camino, cada vez se iba mas lejos, él
solo la veía, no podía hacer nada...
Pasaron dos días y volví a la plaza, el mismo tipo estaba
ahí sentado, cantando la misma canción y la chica en la amaca mirándolo, pero
esta vez ella recién llegaba.
Me acerqué a ella y le pregunte "¿Por qué no te
acercas vos?", a lo que ella me respondió con una extraña mueca en su cara
y con un sonido, algo parecido a "mh...". Se peinó un poco con sus
pequeños dedos y lo siguió mirando.
El tipo la vio y salió corriendo hacia ella, pero ella le
dijo "Otra vez llegaste tarde...", y lo mismo volvió a pasar.
Al día siguiente volví a la misma plaza y le dije al hombre "Andá a las amacas, hay alguien especial esperándote , él se paró miró a las amacas y sonrió, no hablaba, pero se notaba que estaba feliz. Cuando llegó al lugar se acercó a la chica y le agarró la mano, esta vez todo cambió, ella le dijo "Volviste conmigo... Te amo". El loco la abrazó y la besó en la boca, yo desde el otro lado de la plaza estaba mirándolos, eran perfectos, las flores nacian a su alrededor y el rencor moría en el amor de esas dos personas.
El hombre estaba loco, loco de amor por esa mujer que no podía tener, y que sin embargo quería y luchaba por ella.
La mujer solo era una mas, pero encontraba en él una vida por delante y la oportunidad valía la pena.
Al día de hoy, él es mi mejor amigo, mi hermano y aunque esté lejos de mi, tal vez en otro continente, seguimos "comunicados", y estoy feliz de que ella haya sido la que le dio el color a su vida.
The true Love is Forever...
The true Love is Forever...
The true Love is Forever...
The true Love is Forever...
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